Que no sé si es porque te quiero, pero te necesito bien lejos, mentira lo que digo, solo necesito tus besos, enamorados, apasionados, sin silencio ninguno, que solo se oiga nuestros pequeños gemidos por dentro, nuestro amor, nuestra pasión. Una pena que ya te tenga lejos, más lejos aún me refiero, fuera de mi vida, de mi imperfección, de mi corazón, sinceramente, tal vez necesito que vuelvas, pero que vuelvas a ser mía, como una vez dijistes: ''tú mi chico y yo tu chica, siempre.'' ojalá algún día te encuentre por la calle, sola, y mire que en esa mirada hay amor, mucho amor, aún, pero no será así, desgraciadamente.
Tal vez es que te amo, pero te necesito a mi lado, a lado de estos versos, de estas estrofas, de estos llantos, que puede que tú no me leas, ni me quieras pero da igual bueno, en verdad no, pero lo que más me importa es que me quieras cosa que ya no es así.
Que puede que siga siendo el niño chico que te dejó ir silenciosamente, cuando era un crío cuando estaba a tu lado, un crío enamorado de esa persona de la que nunca se enamoró de mi pasado, ni de mi presente, ni mucho menos de mi futuro.
Que tal vez esto lo escriba con sentimiento, con desamor y con ilusión. Pero no es cierto, cierto es que lo escribo con todo mi amor, con todo mi sentimiento y con la ilusión de que volverás, pero no es así, pero me quedan esperanzas.
Que no sé si esto es un amor eterno o uno que se paga a largo plazo, un amor de primavera o un amor de verano.
Solo sé que sé lo que digo, porque viene del verbo saber, del saber que estoy enamorado.
Que es simple de entender y relacionar de que te amo, que te echo de menos, y anhelo tus abrazos, pero no habrá nada de abrazos, ni de besos, ni de hacer el amor con odio y amor, ni de oir tus te quiero's.
Cuando me dijieron que no volverás a mi, todo se me vino abajo, con cada calada y cada trago de vino, cada calada de un cigarrillo.
No sé si quitarme la vida o la esperanza, puede que ambas cosas, pero esos sólo tú lo puedes hacer, desgarrarme todo.
Aunque preferiría que me desgarrases la ropa, que me arañases mi espalda pero con todo el amor eterno. Aunque, ahora, sólamente me has quitado la relación...
¿Pronto? pronto es lo rápido que me olvidas y lo mucho que has tardado en quererme.
No sé si ha sido amor a primera vista, no, imposible, amor a primer mensaje, no sé. Pero todo es tan real y tan perfecto que todo se vuelve fantasma con un eco.
¿Eco? Eco es mi cabeza, con tu adiós y ese no volverás que no mencionastes, o esos días que te despedías sin decir ni mú, del que me hacían pensar, que ya no me querías, y que cierto era.
De cuando dejastes los ''te quiero's'' o los ''te amo's'' a un lado, que se lo dieras a otro, eso es miedo, mucho miedo, duele solo al verlo.
Verlo, no de ver, sino de imaginar, de sentir, de que cada palabra es un nuevo llanto, cada letra es un puñetazo contra la pared. Qué abollada la tengo.
Que te echo de menos, pero no volverás, ¿de qué servirá escribir esto? si nunca los leeras, tampoco hace falta, no eres mía, y yo tuyo, qué pena, antes eramos uno.
Apunto de dejarte he estado miles de veces, eh, que yo también me cansaba de esto de esperar, pero no me podía rendir, recordando desde aquel día hasta el presente, sé que habías hecho mucho por mi. O sea que me echaba atrás.
Atrás, atrás querría volver yo, para decirte el último 'te quiero' o uno de ellos, un 'te anhelo', como el primero..
